Cómo jugar a parejas y calles en el vídeo póquer

Los jugadores de vídeo póquer se enfrentan a una difícil elección: ceñirse a las estrategias básicas o buscar las estrategias ganadoras.

Las decisiones del vídeo póquer sobre qué hacer con las cartas suelen ser fáciles de tomar para los jugadores. Pero a veces los resultados pueden ser impredecibles, lo que puede complicar un poco las cosas. Un buen ejemplo de esto es decidir entre una combinación de pares y conseguir la escalera.

Algunos ejemplos interesantes

Considere esta situación. Jugando al vídeo póquer, un jugador recibe las siguientes cartas de diferentes palos: 3, 4, 4, 5, 6. Así que aquí tenemos una situación doble: un par de cuatros sin pagar o la posibilidad de conseguir la escalera. Si elige la segunda opción, deberá descartar un cuatro. Otra forma es quedarte con el par que tienes con la esperanza de que te salgan otros cuatro y hacerte con un juego. También es posible que un par u otros cuatro caigan junto con él. Como resultado, podemos hablar de un posible full o carêt, que es mucho más fuerte que una escalera.

Un cálculo matemático de expectativas puede ayudar a tomar una decisión en esta situación. Es bastante sencillo, y hay muchos programas que lo hacen automáticamente. En este ejemplo, con 1 euro apostado, la expectativa es de 82 céntimos, manteniendo los dos cuatros. Y la recta es de 68 céntimos. Esto hace que la elección sea obvia.

Supongamos otra situación: una tirada de 8, 9, 10 y dos sotas. Como en el caso anterior, todas las cartas son de distinto palo. Lo primero que hay que tener en cuenta es que, a diferencia de una pareja de cuatros, una pareja de sotas es pagadera. Por lo tanto, a primera vista, podría parecer que este par debería mantenerse, ya que es aún más lucrativo.

Cómo jugar al vídeo póquer y conseguir una pareja o una escalera

Sin embargo, si vas a basar tu elección en la expectativa matemática, tendrás que tener en cuenta que es un poco más alta para una escalera, 72 céntimos a 1€. Porque si la combinación de escalera no lo consigue, hay muchas posibilidades de que obtenga una segunda jota, lo que debería darle una oportunidad de ganar.

Si la combinación contiene una carta alta, la expectativa es mayor. También es posible que el jugador obtenga dos dieces, una jota, una reina y un rey. A primera vista, puede parecer una elección ambigua. Uno puede quedarse con el pade de dieces ya que también paga. En ese caso, la expectativa matemática será de 82 céntimos. Y si se dejan los quilates en la recta, la expectativa matemática sería de 87 céntimos. Es decir, debe elegirse la segunda variante, porque es más rentable.

Conclusión

Probablemente no haya una respuesta sencilla a la pregunta de si es mejor quedarse con una pareja o arriesgarse y conseguir la escalera. Cuando se enfrenta a cartas pequeñas, es mejor igualar una pareja. Si existe la posibilidad de conseguir una pareja que pague, se deben dejar las cartas en la escalera.

Siempre hay que confiar en la expectativa matemática. Puede ser más o menos lo mismo, sólo dos cartas forman una pareja que paga, y dos cartas no.

Es posible tener una escalera no consecutiva, como 8, 10, 10, Jota, Reina y Rey. En ese caso, sólo tiene que quedarse con las cartas si al menos tres de ellas forman una pareja que pague. Si las cartas son del mismo palo y existe la posibilidad de una escalera de color, deben cogerse, aunque no estén en la secuencia y haya una pareja que pague. El riesgo en esta situación se justifica por el elevado pago de dicha combinación.